«Si quieres ser respetado por los demás, lo mejor es respetarte a ti mismo. Sólo por eso, sólo por el propio respeto que te tengas, inspirarás a los otros a respetarte.»
~ Fedor Dostoievski
Tener la capacidad de comunicarte de manera asertiva es muy importante para tu felicidad y tranquilidad.
Asertivo, según la Real Academia Española, viene de aserto. De dar por cierto algo. Viene del latín assertus, que no es otra cosa que afirmar la certeza de una cosa. Tiene relación con la certeza y la firmeza.
Un ser humano asertivo establece un vínculo comunicativo sin agredir a quien lo escucha y sin someterse a su voluntad. Por lo tanto, comunica sus pensamientos e intenciones y defiende sus intereses.
Tú, como SER HUMANO, puedes elegir actuar con certeza.
Ser asertivo es un habilidad social importante que tienes como ser humano y se ubica entre lo que es pasividad y agresividad.
Es un derecho que tienes, enmarcado en unas conductas, para poder expresar lo que sientes sin herir, sin que te hieran, no hagas daño, ni te lo hagan a ti.
Tú, ¡vales oro en la tierra! Y esa valía te la das sólo tú. En tu amor propio, en tu propia confianza, en tu propia satisfacción, en la imagen que tienes de ti mismo.
¿Qué eliges para tu vida?
¿Cuántas veces te sientes triste, solo, pensativo?
¿Qué tan claro estás que, con una comunicación asertiva, tu tranquilidad, tu dignidad juega un gran valor?
Cuando algo te afecta, algo te amarga, no sientes paz interior y no puedes expresarte de manera clara, hay algo en ti que no está funcionando.
Para que haya un equilibrio emocional, espiritual y físico estarás en completa armonía con todos los que están a tu alrededor.
Muchas veces tienes dificultad para expresar lo que sientes, para sugerir, agachas la cabeza en espera de que la situación se arregle por sí sola, no eres capaz de levantar tu mano porque te asusta pedir un favor…
Cuántas veces te callas con tu pareja, con tu jefe, con tus hijos porque sientes que no puedes decir lo que estás sintiendo.
Te invito a que pienses en alguna situación en la que quisieras decir muchas cosas y no lo has hecho…
- ¿Qué es lo que temes que pueda pasar?
- ¿Cuál es la evidencia concreta de que esa persona actuará de manera represiva, como temes?
- ¿Qué piensas que pasaría actualmente?
Ten presente estos puntos clave para que acompañes tu asertividad:
- Lenguaje corporal con tu cabeza erguida y hombros en posición normal. Nunca hacia atrás ni caídos. Tus manos las manejarás de forma natural y sin sudoración.
- Lenguaje claro y fluido.
- Tono de voz claro, fuerte y sereno. Jamás pongas tu mano que cubra tu boca.
- Contacto visual directo.
¡Sé asertivo. Es tu derecho. Estás aquí para ser feliz!
Por Toya, Coach
Coach Empresarial y de Vida
http://www.idelco.org/
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